Desilusión, decepción.

Estar a 26 de diciembre y descubrir que un poco más de la mitad de cosas que hiciste en el año no sirvieron para nada y que en vez de arreglar errores la embarraste más. En vez de esquivar más pozos que el año anterior, resulta que metiste la pata en más pozos todavía. Descubrir que perdí (por asi decirlo) a mi mundito, mi otra mitad, la única persona que podía levantarme en esos días tristes, esa amiga incondicional que con una risa me hacía sentir en otro planeta, nuestro planeta. Descubrir que soy patética, que soy idiota, y que sigo perdonando a gente de mierda que no merece ni siquiera mi mirada. Querer tanto a esa gente de mierda que sufrís por quererla y por verla mal aunque merezca lo peor :(

Soy patética. Nadie me entiende. Pero con poder descargarme simplemente, con tan poco, soy muy feliz. Y por más que toda esta situación sea una M I E R D A, soy feliz. Porque tengo una familia que me brinda cariño y siempre está ahí para darme los abrazos necesarios en los momentos justos. Y por más que mis amigos se cuenten con una mano, soy feliz porque sé que son verdaderos y que nunca los voy a perder.

Mandarle un msj de texto a tu mejor amiga a las 2 y media de la mañana y que te llame inmediatamente para darte consuelo, eso, no se cambia por nada en el mundo, eso me hace sentir completa.

Gente de mierda que me rodea, y también gente hermosa con increíbles valores que vale la pena conocer y que te hace sentir orgullosa de haberte cruzado en su camino. Esa gente linda que te cruza Dios en el camino, esa gente es la que nunca quiero perder. Sigo siendo patética, igual, porque no puedo alejarme de la gente mala, que me hace mal.

Patética, mucha decepción, mucha desilución, mucho consuelo. Muchas versiones diferentes de la realidad pero sola una es la que voy a ver, simplemente que soy P A T É T I C A.